La reducción de velocidad a 110Km/h puede ahorrar como mucho unos 70-100 millones de euros. Nada comparado con los 44.000 millones que nos gastamos en petróleo y gas. El gobierno se fija en el número pequeño: los coches que van por autopista, en lugar del número grandes, los camiones en carretera o el carbón caro y subvencionado. Además, insiste en organizarnos la vida. El ciudadano ya tomo medidas sin esperar al gobierno. El consumo de combustible para coche ha bajado un 7% en dos años, mucho más de lo que conseguirá el gobierno con esta nueva medida.