Publicado en Expansión el 12 de febrero de 2009.
El gobierno alemán ha decidido subvencionar con 2.500€ la compra de cada coche nuevo. Además, paga la publicidad para estimular la compra de coche nuevo y por tanto la renovación del parque móvil (que, así de paso, será menos contaminante).
El resultado ha sido inmediato: los concesionarios de coches han pasado de vender poco, a tener que abrir los sábados para atender a los clientes. Esto ha tenido también efectos en España, donde algunos fabricantes han ampliado el número de jornadas a trabajar (y reducido sus EREs), para satisfacer esta demanda del mercado alemán.
En España el sector automóvil (fabricantes de coches más la industria auxiliar que provee los materiales) representa un 9% del PIB. No es un sector baladí. ¿No deberíamos pensar en un plan similar al de Merkel? Sobre todo si a los alemanes parece que les funciona. No soy amigo de subvenciones, pero sí creo que cualquier propuesta hay que estudiarla y hacer los números.
He preguntado a algunos directivos con muchos años de experiencia en el sector del automóvil y me dicen que, más o menos y en números “gordos”, una subvención de 2.000€ por coche, generaría una demanda extra de 100.000 coches, y unos 10.000 puestos de trabajo (2.500 en fábricas de coches y 7.500 en la industria auxiliar del automóvil). Eso le costaría al Estado 200 millones de euros. No es tanto si se compara con los 80 que se dan al cine español.
¿Y cuánto le cuesta al Estado 10.000 personas en paro? Supongamos un coste salarial promedio de 30.000 €/año por trabajador. Números gordos, 7.000 van a la Seguridad Social (parte empresa) y otros 5.000 van al IRPF y a la Seguridad Social (parte del trabajador). Al trabajador le llegan 18.000€ (no es para tirar cohetes!). Pues bien, si el trabajador se va al paro, el Estado deja de recibir 12.000€/año y además, tendrá que pagar unos 10.000€ por subsidio de paro. Total, la broma te cuesta 22.000€ por trabajador que se va al paro, y 220 millones toda la operación (10.000 trabajadores).
Con estas cifras, claramente compensa el plan “Renove”. Mejor es gastar 200 millones por trabajar que 200 millones por estar parado. Primero, porque el paro realmente deprime mucho al individuo. Segundo, porque no conviene estimular al caradura (seguro que son pocos) a que se vaya al paro. Y tercero, porque ya de paso algunos compraremos coches, nos animaremos y animaremos a los vecinos y de paso al conjunto de la economía. ¿No ha pensado en esto el gobierno?