Artículo publicado el El Periódico de Catalunya el 3 de enero de 2013.
Un país solo tiene dos herramientas potentes para paliar y moderar los efectos de la crisis (y el boom) económico: el banco central y el presupuesto. En España no tenemos banco central y el presupuesto nos lo gastamos hace años. Por lo tanto los gobiernos de aquí poco pueden hacer.
Los países europeos hemos cedido nuestros bancos centrales para formar el BCE. Es lógico pues que el BCE se preocupe del bien de todos y que actúe, sobre todo en situaciones tan excepcionales como las que vivimos: la crisis más gorda y más larga desde 1929.
Estados Unidos tuvo la misma crisis que nosotros (Europa) en 2008-09. Nada más empezar esta, la FED (Reserva Federal o banco central de EE.UU.) inyectó en la economía 2.000 millardos (miles de millones) de dólares. Esto y la intervención del gobierno vía presupuesto con otros 700 miles de millones propició que el crecimiento de la economía pasara del −3,5% en 2009 a casi un +3% en 2010. Se acabó la crisis para ellos.
En Europa, el BCE inyectó 1.000 millardos, la mitad que en USA. Lo hizo en 2011 y 2012, es decir entre 3 y 4 años más tarde y cuando ya el enfermo estaba mucho peor. Resultado, el crecimiento económico no se ha recuperado en Europa.
Ahora la FED, a través de su presidente, Ben Bernanke, ha reiterado que inyectará 60 millardos cada mes, mientras que el paro no baje del 7%. En EE.UU. la economía crece «solo» al 1,7% y «se ponen las pilas». En Europa, con paro muy superior al de EE.UU. y crecimiento casi 0% en 2012, el BCE no hace nada.
Me dirán algunos que el objetivo del BCE es exclusivamente la estabilidad monetaria (inflación baja) y que no tiene responsabilidades sobre el crecimiento. Cierto, es así. Pero yo digo: cámbiese. El BCE debe fomentar y/o moderar el crecimiento económico. Renunciar a la acción del BCE es cortarte una de las dos piernas que tienes para andar. Es absurdo y suicida. En tiempos normales la acción del BCE no es necesaria, como no lo es la transfusión de sangre para una persona sana. Pero si el enfermo se desangra a raudales hay que hacerle transfusión y no confiar en que ya él solo regenerará la sangre. Por lo mismo, el BCE debe actuar y no esperar a que dentro de 10 años la economía se haya regenerado.
Algunos dirán que si el BCE inyecta dinero se producirá inflación. Falso. La experiencia de EE.UU. lo demuestra. La FED inyectó mucho dinero y la inflación no ha aumentado: en el 2008 era del 3,8% y en el 2011 del 3,1%. En Europa, sin ayuda monetaria, ha sido del 2,7%. La inflación sólo aumenta cuando se inyecta más dinero de la cuenta durante más tiempo de la cuenta. Pero esto es fácilmente evitable: si la economía se reactiva, se retira el dinero y se acaba el problema. El BCE puede retirar dinero casi cada semana.
En fin, que Europa y sus gobernantes deberían «ponerse las pilas» de una vez para, dejando de lado prejuicios, ponerse a construir una unión económica que de verdad funcione. Mientras tanto… a penar.
Totalmente deacuerdo con su artículo profesor Abascal.
Pregunta: el hecho de no inyectar tan necesitada liquidez, no será que el BCE (supuesto conjunto de Bancos Centrales) está condicionado por posibles intereses germanos de que algunos paises sureños continuen con cierta crisis????
Me gustaria conocer las formas que utilizan los bancos centrales para inyectar esta liquidez y/o retirarla, tal como comenta usted, semanalmente.
muchas gracias
Además de estos buenos argumentos, yo añadiría el siguiente aspecto. Habrá una guerra de divisas fuerte, la FED imprime dinero, el banco de Inglaterra, Japón en incluso suiza…y el BCE de brazos cruzados, esto puede conducir a una apreciación a la alza del euro, por el puro hecho de oferta y demanda de la divisa. Y si pensamos salir de la crisis con las exportaciones famosas, no sé cuanto se podrá exportar con un euro más caro. En fin, supongo alguno de los miles de asesores del BCE habrá mirado alguna gráfica y se den cuenta de lo que pasa.