Hay más consejeras, pero todavía son pocas. Así podríamos resumir los resultados del estudio “El papel de la mujer en los consejos de administración de las empresas cotizadas españolas”, que acabamos de publicar en la Cátedra de Empresa Familiar del IESE.
Está claro que la mujer tiene cada vez más presencia en los consejos de administración. Tras analizar 71 empresas que han cotizado ininterrumpidamente en el Mercado Continuo español de 2004 a 2015, encontramos que en el año 2004 había 46 compañías que no tenían ninguna mujer consejera, mientras que en el 2015 solo hay 11 sin representación femenina en el consejo de administración. Ya en 2013, un estudio del IESE concluía que la presencia de la mujer en los consejos había pasado de ser una excepción a ser una norma.
Sin duda, es buena noticia que el número de mujeres consejeras aumente año tras año, pero la proporción de mujeres en los consejos de administración todavía se sitúa en valores muy bajos. Asistimos a un crecimiento positivo pero insuficiente de la presencia femenina en los consejos, como señala el Índice Spencer Stuart, que desde 1996 analiza los consejos de administración.
Pongamos los datos en contexto: España ocupa la posición 19 a nivel mundial, con un 16,3% de mujeres consejeras, por detrás de Austria (16,4%), según el informe Women in the boardroom: A global perspective de Deloitte. En relación con Europa, España sigue 3 puntos por debajo de la media europea, que se sitúa en el 23,3%, señala el último estudio de Atrevia & IESE sobre Las mujeres en los consejos del Ibex 35.
¿Y qué pasa en las empresas familiares? Pues que siguen la tendencia general: también se aprecia un crecimiento positivo de la presencia femenina en los consejos de las empresas de propiedad familiar. En nuestro estudio hemos analizado 39 empresas familiares y 32 no familiares, y los resultados indican que la brecha de género entre ambos grupos se va cerrando con el paso del tiempo.
En el año 2004, las empresas familiares analizadas tenían una media del 6,7% de mujeres consejeras, mientras que en las no familiares la media se situaba en el 2%. Con el paso de los años, el número de mujeres en los consejos se ha ido igualando y, en 2015, la media de mujeres consejeras en las empresas no familiares se sitúa en el 17%, dos puntos por encima de la media en las empresas familiares (15%).
Así que, poco a poco, los consejos de administración se van feminizando, tanto en las empresas familiares como en las no familiares. Ya hemos hablado en In Family Business de las características del liderazgo femenino y los beneficios que aporta la mujer a la empresa familiar. Pero, ¿por qué interesa que haya más consejeras, concretamente? Y si realmente es tan positivo contar con más mujeres en los consejos, ¿cuáles son las barreras de entrada que dificultan su incorporación? Intentaré arrojar un poco de luz sobre estas cuestiones en mi próximo post.