¿Es mejor optar por mecanismos formales o informales para vehicular la comunicación de los miembros de la familia empresaria? Según los datos del estudio sobre comunicación y
valores que hemos realizado la Cátedra de Empresa Familiar del IESE y Atrevia, 8 de cada 10 encuestados considera que la existencia de mecanismos de comunicación formal favorece el compromiso de la familia con la empresa, ayuda a transmitir los valores familiares, mejora la calidad de las relaciones familiares y contribuye a la continuidad del proyecto empresarial compartido.
Guillermo Zambrano, de la empresa mexicana Proeza, explica que organizan distintos eventos para facilitar la comunicación entre la familia, como el foro familiar o el retiro familiar. La familia de Santiago Casanueva, propietaria de Interprotección, en México, celebra dos eventos al año, en los que “se informa a todos los miembros de la familia mayores de 15 años sobre qué se está haciendo en el Grupo y quiénes son nuestros clientes principales».
No obstante, el estudio también revela casi un 60% de los encuestados reconoce que no cuenta con ningún mecanismo de comunicación formal entre los familiares, y que los asuntos del negocio se comentan en encuentros informales. “Muchas veces nos juntamos los familiares un fin de semana y conversamos sobre los distintos temas relacionados a la compañía”, explica Gonzalo Tanoira, vicepresidente Grupo San Miguel en Argentina.
Cuando los encuentros familiares no son suficientes, algunas empresas aprovechan las nuevas tecnologías de información y comunicación y crean canales complementarios para mantener activa la comunicación entre los miembros de la familia. Por ejemplo, el grupo Proeza tiene una intranet familiar y, en Organización CARVAJAL, los familiares pueden seguir la asamblea familiar a través de videoconferencia, explica Gustavo Adolfo Carvajal, presidente de la Junta Directiva.
Más allá de si son formales o informales, creo que lo importante es que existan vías de comunicación y puntos de encuentro en los que los familiares puedan relacionarse, pues esto favorecerá la cohesión familiar. A veces, el lugar es lo de menos. Mariano Puig siempre explicaba que él y sus hermanos habían aprendido mucho en la mesa del comedor de su casa, donde su padre les hablaba de su día a día y de lo que sucedía en la empresa.
Y en vuestra familia, ¿preferís la comunicación formal o informal? ¿Qué tipo de encuentros organizáis? ¿Aprovecháis las nuevas tecnologías para comunicaros?
Estimado profesor:
Yo creo que son tan importantes los canales formales como los informales y que ambos son complementarios.
La Familia, cuando ya los hijos están estudiando en la universidad o trabajando en la Empresa, según mi experiencia, prefieren los canales formales como el Consejo de Familia.
Ahora bien, los Valores se transmiten fundamentalmente en la casa cuando los hijos son pequeños. Es por eso, que hay que empezar a transmitir esos valores de forma informal con objeto de que , desde pequeños, empiecen a valorar tanto la Empresa Familiar, como la Responsabilidad social de la Empresa, así como el trabajo en «su» Empresa Familiar.
Miguel Ángel Gallo decía: «no se puede amar, lo que no se conoce».
Un abrazo: Florencio.
Apreciado Florencio,
Coincido contigo en que es importante combinar la comunicación formal con la informal para transmitir los valores a los miembros más jóvenes de la familia desde que son pequeños. Como bien dices, no se puede amar lo que no se conoce.
Un saludo,
Josep Tàpies