En el post anterior señalaba que la elaboración del patrimonio vital es un proceso colaborativo lento que puede resultar muy enriquecedor para los miembros de la familia empresaria. Pero, ¿cómo se despierta la conciencia, o la necesidad, de un sistema de patrimonio vital en el seno de una empresa familiar? ¿Cómo pueden analizarse las motivaciones, individuales y colectivas, que animan a emprender el camino?
Normalmente, una familia empresaria se plantea elaborar su patrimonio vital por iniciativa de alguno de sus miembros que cree en la importancia de fomentar permanentemente el sentimiento identitario de la familia. Para la elaboración del patrimonio vital puede ser aconsejable recurrir a expertos en la materia, igual que se hace durante el proceso de elaboración de un protocolo familiar. Estos asesores pueden guiar el proceso de desarrollo del sistema de patrimonio vital.
Siguiendo la propuesta de Felipe Gómez-Pallete que se recoge en la nota técnica «Incorporación del patrimonio vital a la agenda de la familia empresaria», podemos distinguir cuatro fases en el desarrollo del patrimonio vital:
Fase 1: aproximación
En esta etapa se mantendrán conversaciones con cada uno de los miembros de la familia. Será el momento de conocer las opiniones y creencias de cada uno de ellos sobre la posibilidad y la utilidad de abordar este proyecto. Con la información recogida, el consejo de familia podrá valorar la conveniencia de elaborar el patrimonio vital, teniendo en cuenta sus posibles beneficios y usos.
Fase 2: reflexión
Si el consejo de familia considera que vale la pena acometer este proyecto, convocará una reunión para reflexionar sobre el patrimonio vital. En este encuentro, los miembros de la familia deberían plantearse cuestiones como:
- ¿Crees que disponer de un sistema de patrimonio vital puede ayudar a mantener los ejes y los valores de la empresa familiar? ¿Por qué?
- ¿Qué importancia darán las generaciones venideras al sistema de patrimonio vital?
- ¿Cómo le explicarías a un miembro de la siguiente generación la importancia que tiene para ti disponer de un sistema de patrimonio vital?
Fase 3: análisis
En esta etapa hay que identificar el conjunto de elementos que compondrán el sistema de patrimonio vital. Se puede encomendar el liderazgo de esta fase a la persona que propuso iniciar el proceso de elaboración del patrimonio vital.
Fase 4: acción
Llega el momento de elaborar el patrimonio vital. Para ello, es útil definir las tareas que habrá que realizar y los procedimientos a seguir. ¿Quién se encargará de buscar y recopilar los materiales? ¿Será necesario digitalizarlos? ¿Cómo se seleccionarán los elementos que se incluirán en el patrimonio vital? ¿En qué formato se recopilará todo el material?
También conviene sistematizar el proceso de actualización del patrimonio vital, pues no hemos de olvidar que se trata de un sistema vivo que hay que cuidar y alimentar. A medida que la empresa familiar avance, se deberían ir registrando esos avances en el patrimonio vital, para poco a poco ir construyendo este legado identitario para las siguientes generaciones.
Y vosotros, ¿cómo preserváis el legado vital de vuestra empresa? ¿Con qué mecanismos contáis para mantenerlo al día?
Profesor Tapies,
Sigo su blog desde hace tiempo, y casi siempre estoy de acuerdo con sus apreciaciones, aunque disiento en lo que se refiere al Patrimonio Vital (PV)l. El término me confunde un poco porque lo que usted propone como PV, desde mi punto de vista tiene que ver con la «cultura familiar». Mientras que «patrimonio» parece un concepto clausurado,» cultura «parece más abierto, y por tanto recoge mejor el dinamismo de la empresa familiar, como un sistema cambiante ,dinámico, y en continua transformación.
Por otra parte, tratar de formalizar losaportes del PV como una herramienta de Gestión, me parece raro. Desde mi punto de vista lo más importante es el sentido, y los valores compartidos. Lo «histórico» es muy valioso para comprender el presente, pero las generaciones que se van incorporando tienen la responsabilidad de recoger el testigo y adaptarse a las circunstancias que les toque vivir.
Saludos,
Berta V.
Apreciada Berta,
Hemos utilizado el término «patrimonio vital» porque es el que usamos en la nota técnica que preparé con Felipe Gómez-Pallete. Se trata de un término acuñado y registrado por Felipe y Paz de Torres, como explicaba en el post de hace dos semanas.
También se podría utilizar el término endowment o acervo, pero hemos preferido mantener la denominación utilizada por Felipe Gómez-Pallete.
Un saludo,
Josep Tàpies