8 características que todo accionista comprometido debería tener

En toda empresa es de vital importancia que los accionistas estén bien avenidos, pues está en juego la continuidad del negocio. En la empresa familiar, además, está en juego el patrimonio familiar. Por eso es aconsejable contar no solo con accionistas responsables sino también comprometidos.

La vinculación de un accionista comprometido −sea miembro de la familia o no− con la empresa familiar va más allá de la propiedad de títulos. El accionista comprometido no solo posee acciones sino también un fuerte apego emocional con el proyecto empresarial que le lleva a velar por su continuidad. En resumen, un accionista comprometido es aquel que más allá de la propiedad económica siente una fuerte propiedad psicológica por la empresa, como explicamos en la nueva serie de podcasts que hemos lanzado.

Cada persona es única y no se puede generalizar, pero en base a mi experiencia me atrevo a señalar ocho características que comparten la mayoría de accionistas comprometidos con la empresa familiar:

1. Entienden, aman y respetan lo que tienen. En realidad, esta es una buena definición de lo que es el compromiso del accionista: entiende la empresa familiar porque la conoce; ama lo que tiene porque forma parte de su historia personal y familiar; y precisamente por eso lo respeta y quiere ayudar a que el proyecto siga creciendo, como explico en el siguiente punto.
2. Están dispuestos a invertir su tiempo y sus capacidades en la empresa. Cuando se entiende, ama y respeta algo, es natural esforzarse por mantenerlo y trabajar por verlo crecer. Eso es lo que hacen los accionistas comprometidos: dedican tiempo y esfuerzos a que el proyecto empresarial funcione. La inversión de un accionista comprometido no solo es económica sino también personal.
3. Conocen las reglas de juego y están dispuestos a respetarlas. Todo buen futbolista o jugador de cualquier deporte conoce el reglamento y lo cumple. La empresa familiar también es un deporte de equipo, y para formar parte de ella es imprescindible respetar tanto las normas de la familia como las de la empresa.
4. Entienden y aceptan la diferencia entre propiedad, gobierno y gestión. Cuando la empresa familiar crece y hay muchos accionistas, es obvio que no todos pueden estar en el consejo de administración ni pueden ocupar cargos directivos, pero todos están representados en la junta general de accionistas. Los accionistas comprometidos aceptan esta situación y se preparan para asumir cargos de gobierno, si algún día llega la ocasión.
5. Se forman para poder aportar valor. Un accionista comprometido colabora en la medida de sus capacidades a la buena marcha del negocio, pero para eso ha de tener una formación mínima: un nivel básico de finanzas, conocimientos de estrategia y organización empresarial, y nociones del uso del capital y de las inversiones.
6. Están bien informados. Los accionistas deben tener siempre una información veraz, completa y adecuada de la empresa, pues si carecen de ella difícilmente podrán realizar aportaciones de valor al proyecto empresarial. En este sentido, es recomendable establecer vías de comunicación por las que los accionistas puedan consultar los temas que les preocupan.

7. Saben lo que tienen y se sienten cómodos con ello. Como ya he comentado, para que el accionista pueda desempeñar bien su rol activo y responsable ha de saber lo que tiene y lo que representa, por qué razones lo ha obtenido, y qué derechos y deberes supone la posesión de acciones. Admitir la posición que ocupa dentro de la familia y de la empresa no significa renunciar a sus aspiraciones y a sus nobles ambiciones, sino entender de manera responsable qué se espera de él o de ella.
8. Se sienten justamente tratados y tenidos en cuenta. Un accionista comprometido y consciente de su rol aporta sus ideas con generosidad para mejorar la marcha de la empresa familiar, y cuando lo hace se siente escuchado y respetado por el resto de accionistas y por los órganos de gobierno.

Estos son, a mi modo de ver, ocho rasgos que caracterizan a los accionistas responsables y comprometidos. ¿Añadiríais alguno más a este listado? ¡Animaos a participar dejando un comentario!