¿Eres de los que piensa: “Yo soy así y no puedo cambiar”, o de los que se dice a sí mismo: “Tiendo a ver las cosas de este modo, pero si me esfuerzo puedo buscar un enfoque distinto”? ¿Eres capaz de centrarte en lo verdaderamente importante o en tu día a día las urgencias te hacen perder el foco? ¿Has pensado alguna vez qué te gustaría que dijeran de ti cuando abandonas una sala?
Son preguntas que invitan a la reflexión y que todos deberíamos plantearnos en algún momento. Las respuestas nos dirán si somos proactivos o tendemos a actuar de forma reactiva; si tenemos claras nuestras prioridades, y si sabemos cuál es nuestra misión personal en la vida. Cuestiones esenciales para cualquier persona y que, cuando hablamos de accionistas en la empresa familiar, pueden marcar la diferencia entre ser accionistas por imposición o por convicción.
Para todo miembro de la familia empresaria, ser o no accionista de la empresa familiar debería ser una elección libre y meditada. Porque, más allá de un rol sobre el papel, ser accionista supone una responsabilidad y un compromiso con la familia y con la empresa. Lo idóneo es que el accionista sea responsable y se sienta comprometido, pero también feliz. El nivel de bienestar influye positivamente en los propietarios y consecuentemente en la empresa.
Un accionista feliz lo es porque ha encontrado un sitio en la empresa familiar que le motiva y desde el que puede aportar lo mejor de sí mismo, razones que le llevan a experimentar un fuerte orgullo de pertenencia y a sentir una propiedad psicológica fuerte y positiva hacia el proyecto empresarial de la familia. Así lo explica la investigadora Lucía Ceja en este artículo publicado en In Family Business y así se refleja también en la serie de podcasts con la que hemos iniciado el curso.
A ser un accionista responsable y feliz se puede aprender, y estos podcasts ofrecen algunas pistas para lograrlo. Desarrollar el liderazgo personal permite aumentar el grado de bienestar y felicidad. ¿Y cómo se desarrolla el liderazgo personal? Fomentando una serie de hábitos. En la serie de podcasts nos centramos en tres: cómo ser un accionista proactivo, cómo identificar la misión personal y cómo aprender a poner el foco en lo importante.
Esperamos que los ejercicios que os proponemos os ayuden a poner en práctica estos hábitos, que os permitirán mejorar vuestro liderazgo personal y, a su vez, llegar a ser unos accionistas más comprometidos y, sobre todo, más felices.