Pedro Durán, el platero de palacio

Juan Miguel Albarracín Durán es el presidente y consejero delegado del Grupo Durán, una empresa joyera fundada por su bisabuelo hace más de 135 años.


Nuestra empresa se fundó en 1886 por mi bisabuelo Pedro Durán Morales, orfebre de profesión. En 1899, fue nombrado proveedor de la Real Casa, un hito de enorme trascendencia en la época para darse a conocer como una marca de calidad, acceder a miembros de la nobleza y ampliar su clientela.

Fue sin duda un hombre adelantado a su tiempo y con una acertada visión de la responsabilidad social corporativa. En 1904, estableció su propia sociedad de socorros mutuos para la protección de los operarios y dependientes de la fábrica de platería, que funcionaría casi 60 años hasta la implantación de la Seguridad Social en 1963.

Mi bisabuelo Pedro Durán Morales, orfebre de profesión, fue un hombre adelantado a su tiempo y con una acertada visión de la responsabilidad social corporativa.

Tras su muerte, su hijo Pedro Durán Rey continuó desarrollando el negocio de la orfebrería. La vida de mi abuelo transcurrió entre juegos de café, cuberterías de plata, candelabros, diez hijos y una contienda por medio: la guerra civil española.

Finalizada la guerra y el taller sin encargos, mi abuelo Pedro readmitió a todos los empleados, proporcionando un alto grado de confianza entre la plantilla. Motivados, se pusieron a preparar el taller para los futuros encargos y contribuyeron a la recuperación de la empresa.

La tercera generación lideró una gran expansión de la empresa, primero con el negocio de la “plata firmada” de Pedro Durán y luego con la construcción de una nueva fábrica de unos 13.000 metros, equipada con la más avanzada tecnología. La compañía también amplió su alcance global, con exportaciones a 55 países.

Mis primeros recuerdos

Los sábados, mi tío Santiago solía llevar a sus sobrinos a visitar la fábrica de platería, donde los operarios de las distintas secciones nos enseñaban a desarrollar piezas y soldar jarras y candelabros.

Esas vivencias y el contacto con la plata y los equipos de producción nos vincularon con el negocio. Con la plata por las venas, acabamos conociendo perfectamente todo el proceso de fabricación y la colección completa.

Con la plata por las venas, acabamos conociendo perfectamente todo el proceso de fabricación y la colección completa.

Con los años, nos fuimos reencontrando ya como empleados en diferentes áreas del negocio y nos incorporamos hasta 12 primos. Ahora sería una barbaridad, pero antes era como se planteaban las sucesiones.

La evolución del negocio familiar

Empecé a trabajar en la empresa con 21 años para desarrollar una nueva actividad: “las exposiciones de artesanía china”. De la mano de mi tío Roberto, a los tres meses de mi incorporación me encontraba en China, visitando Hong Kong, Pekín, Tianjin y Shanghái y Guangzhou, comprando porcelanas, alfombras, maderas talladas, corales y marfiles, y estableciendo contactos y relaciones.

Esta experiencia fue un gran aprendizaje que me abrió las puertas para asistir a las ferias internacionales de joyería, relojería y decoración. A lo largo de los años, he llegado a conocer de primera mano el universo retail fuera de España y el mundo del lujo y las firmas más deseadas por el público.

Valores familiares y dejar huella para futuras generaciones

Nuestros valores como empresa son a veces intangibles, pero siempre muy presentes: una clara orientación al arte y la cultura, al diseño, al buen gusto por los objetos bellos y de alta calidad que perduren en el tiempo, el lujo, y por supuesto, la tradición.

Nuestro negocio se basa en el respeto hacia nuestros proveedores, con los que colaboramos desde hace muchos años, el buen trato y respeto a todos nuestros equipos, en los que buscamos su desarrollo dentro de la empresa y su compromiso con el objetivo de retener su talento.

Es primordial preservar el ADN de la empresa para futuras generaciones, así pueden conocer su origen y seguir desarrollando el orgullo de pertenencia.

Es primordial preservar el ADN de la empresa para futuras generaciones, así pueden conocer su origen y seguir desarrollando el orgullo de pertenencia. Por ese motivo, sobre el año 1995, propuse al Consejo de Administración la edición de un libro que reuniese toda la historia de la empresa, familia, producto, diseño y evolución durante su primer siglo de vida.

El Consejo aprobó el proyecto tres años más tarde. Publicado en 1998, Pedro Durán: 112 años diseñando en plata y joyas, 1886-1998 es el resultado de 17 meses de investigación y la recopilación de fotografías, documentación, piezas y diseños del siglo pasado. Es prologado por el Premio Nobel de Literatura Camilo José Cela y editado en español, alemán, inglés y portugués.

Nuestra hoja de ruta: el organigrama y protocolo familiares

Actualmente convive la tercera y cuarta generación en la empresa y nuestro mayor reto es no conformarnos con gestionar lo que hemos heredado: hay que hacerlo crecer y modernizarlo continuamente para estar siempre a la vanguardia y sentir nuestros negocios como algo vivo en constante evolución.

Hace más de diez años, una consultora nos ayudó a establecer el organigrama actual, que lleva funcionando eficazmente. Gracias a esta estructura, contamos con la generosidad y visión a largo plazo de la generación saliente, que sigue ayudándonos en la gestión durante una etapa inicial y posteriormente, desde el Consejo de Administración.

Somos cuatro estirpes familiares y estamos convencidos de que los cambios hay que hacerlos a tiempo. Por eso, decidimos desarrollar un protocolo familiar con el apoyo de bufete de abogados. Ha sido especialmente útil en las sucesiones al Consejo de Administración, donde hay dos miembros de la familia por estirpe –uno de la tercera y otro de la cuarta– y según falta alguno, se sustituye por otro miembro de la misma familia.

Estamos convencidos de que los cambios hay que hacerlos a tiempo. Desarrollar un protocolo familiar nos ha sido muy útil, especialmente en las sucesiones al Consejo de Administración.

En el área comercial, realizamos un profundo estudio de mercado, del sector y de cada una de las divisiones del Grupo Durán, la platería Pedro Durán, Durán Subastas de Arte y Durán Joyeros, identificando todo el potencial y capacidades de desarrollo de las mismas para establecer un plan de negocio realmente sólido.

Ese proceso involucró a toda la dirección y nos ayudó a mejorar nuestra forma de hacer los planteamientos, presentar los proyectos, y a seguir forjándonos como empresarios.

La evolución del Grupo Durán  

A lo largo de los años, hemos diversificado nuestro negocio, que hoy cuenta con cuatro grandes pilares: Pedro Durán, Durán Joyeros, Durán Arte y Subastas, y Durán Exquse, una línea de joyas enfocada a un público más joven.

Crecer es un objetivo, pero debemos hacerlo bien. Nuestra especialización son artículos de alto valor y escasez que mantienen su belleza atemporal, por lo que creceremos orgánicamente y con proyectos muy cuidados y cualitativos.

Estoy muy orgulloso de nuestra historia, pero siempre mirando al futuro con una visión empresarial innovadora. Nuestro reto es seguir creando propuestas imaginativas e innovadoras a gusto de los consumidores y mantenernos al día porque, en la actualidad, los cambios son constantes y muy rápidos.