Cuando las empresas familiares van avanzando de generación en generación surge la figura del accionista que desempeña un rol único: solo es accionista. No es administrador en el consejo de administración, ni tampoco es directivo en la empresa.
Es frecuente hablar de la importancia de que sea un accionista responsable y comprometido. Y también cuidador de la empresa familiar, en base al concepto de stewardship. Estoy totalmente de acuerdo en ello y de la importancia de que los accionistas aporten esta estabilidad necesaria a la empresa para asegurar su futuro.
Pero en este post quiero referirme a lo qué esperan de sus empresas familiares. Señalaría cuatro necesidades de estos accionistas. Es importante que los que gobiernan y dirigen la empresa no se olviden de ellas:
1 – Liderazgo: equipos de gobierno y dirección competentes y competitivos
Los que gobiernan y dirigen la empresa deben desarrollar una alta capacidad de liderazgo para lograr llevar a cabo los planes económicos de la empresa, y el desarrollo de las personas de la organización.
Extendiendo este liderazgo, además de su vínculo con los accionistas, a su relación con todos los stakeholders de la empresa. Deben impulsar este liderazgo emprendedor para lograr que la empresa sea competitiva a futuro.
2 – Dividendo emocional y dividendo económico
Está muy bien el orgullo de pertenencia y el vínculo emocional con la empresa, pero ello no debería sustituir o compensar la falta de una rentabilidad de mercado, competitiva, acorde con la inversión económica de su capital, y del nivel de riesgo de los negocios que los accionistas asumen en su empresa familiar
Establecer unos criterios sobre dividendos ayuda a que los accionistas conozcan qué pueden esperar en términos económicos de su empresa. Y aunque lo ideal es que vivan de su trabajo, y no solo del dividendo, este puede, y suele ser con frecuencia, un complemento adecuado para asegurar su bienestar personal y familiar.
3 – Información, pero algo más: accountability
Por supuesto que el derecho a una información precisa y transparente cada vez se cumple en mayor medida, pero se requiere un paso más, una actitud por parte de los equipo de gobierno y dirección de reportar, y de dar recurrentemente las explicaciones pertinentes.
Explicaciones no de todo, sino de lo que corresponde conocer, y sobre todo decidir, por parte de los accionistas.
Aquí es importante indicar la necesidad de formación de todos los accionistas para que puedan comprender el alcance y el contexto de la información que reciben, y aplicarlo a sus decisiones para aprobar o no, los temas importantes que les corresponden.
4 – Respeto
Finalmente hay que respetar el rol de estos accionistas, en ocasiones llamados “pasivos” frente a los que trabajan en la empresa, llamados “activos”. A veces, como todos son familia, y con los que hay un trato frecuente, no se hace el suficiente esfuerzo para reportarles los hechos relevantes que se deben.
En base a la confianza mal entendida, se considera que no es necesario dar tantas explicaciones. Y ello es un error porque la confianza debe ser compatible con un ejercicio riguroso de los derechos y obligaciones por parte de todos, y de cada uno desde su rol: accionista, administrador o directivo.
Por supuesto este respeto debe ser mutuo, es decir, también desde los accionistas hacia los administradores y directivos. El conocimiento del rol de cada uno, los niveles de decisión clarificados, y disponer de unos sistemas de evaluación profesionales, permitirán que la confianza no esté solo basada en la relación emocional y del apellido, sino del desempeño riguroso y profesional.
Los accionistas que tienen varios de estos roles a la vez, deben aprender a distinguir qué sombrero llevan en cada órgano de decisión –junta de accionistas, consejo de administración o comité de dirección– y ceñirse al que toca en cada momento. Cuando no hay distinción, se genera confusión.
Si todo ello logramos que funcione así, con toda probabilidad para los accionistas, sus acciones en su propia empresa familiar serán la mejor inversión a lo largo del tiempo, y un legado de gran valor para sus descendientes.
Imagen en la home: SEO Galaxy · Unsplash