Si cada año te haces un chequeo médico, ¿por qué no haces lo mismo con tu empresa familiar? A veces, el día a día y la presión de los resultados pueden hacer que perdamos de vista el largo plazo, tan característico de las empresas familiares. Un buen chequeo puede ayudarnos a diagnosticar si estamos en situación de normalidad o por el contrario debemos cuidar determinados aspectos que podrían amenazar la sostenibilidad de la empresa familiar.
Esta es la intención que ha movido al equipo de profesores e investigadores de la Cátedra de Empresa Familiar del IESE a diseñar un programa para verificar el estado de salud de la empresa familiar.
Como equipo, pensamos que hay que tener en cuenta estos seis ámbitos:
- El grado de cohesión y adaptabilidad de la familia propietaria. Una familia unida y capaz de adaptarse a los cambios del entorno, de la propia familia, de las circunstancias que alteran las relaciones personales y de la evolución del propio proyecto empresarial, tiene más posibilidades de perdurar en el tiempo.
- La sostenibilidad del negocio. Según el Diccionario de la Real Academia Española, ‘sostenible’ significa que se puede mantener durante largo tiempo sin agotar los recursos. Ahí es nada la definición aplicada a la empresa familiar. La empresa familiar lo es porque es ante todo empresa y toda empresa busca ser rentable y sostenible. De lo contrario adiós a todo lo demás.
- El tipo de propiedad y su rol. ¿Qué tipo de empresa familiar queremos ser? ¿Qué papel queremos que tengan los miembros de la familia en el día a día del negocio? Las respuestas a estas preguntas darán lugar a un tipo de empresa u otro, y definirán la relación y la dedicación de los miembros de la familia con la empresa.
- El rol del consejo de administración. Debería actuar como mentor del comité de dirección, pero sin llegar a interferir en la labor del máximo órgano ejecutivo de la empresa.
- El rol del consejo de familia. Es el lugar de deliberación y de debate en el que la familia trata los temas relacionados con la empresa y toma decisiones familiares en relación al negocio.
- El proceso de sucesión. El 53% de las empresas familiares no cuenta con un plan de sucesión del CEO, según revela el estudio “La sucesión del primer ejecutivo en la empresa familiar” que hemos publicado en colaboración con KPMG y Russell Reynolds. El proceso de sucesión es clave para asegurar la longevidad del negocio pero también para el futuro de las siguientes generaciones de la familia propietaria. Por eso es esencial planificarlo adecuadamente.
A partir del diagnóstico de estos seis ámbitos es posible identificar áreas de mejora. Y, si se cuenta con las herramientas adecuadas, la empresa familiar puede mejorar en todas ellas. Proporcionar herramientas de análisis y pautas de actuación es precisamente lo que pretende el programa enfocado Chequeo a la salud de tu empresa familiar, que hemos preparado desde la Cátedra de Empresa Familiar del IESE.
Creo que la empresa familiar es la empresa con más problemas para tener involucrar los negocios y los sentimientos no siempre es bueno. Un saludo