Repensar las ONGs

Ayer tuvimos en la sede del IESE en Barcelona una sesión del Programa de Continuidad sobre “Relaciones entre empresas y ONGs: ¿conflicto, cooperación, o un nuevo reparto de papeles?”. Los invitados fueron Manuel Almirall, de Fundació Futur, José Ignacio González-Aller, de Fundación Codespa, y Sergio Loughney, de Abertis. Salieron muchas ideas interesantes, entre ellas:

• La crisis nos obliga a repensar las ONGs. Muchos de los esquemas antiguos (de financiación, de organización, de gobierno, etc.) ya no sirven. Sobre todo hay que repensar las pymongs (pequeñas y medianas ONGs) (la palabreja se me ha ocurrido a mí, y espero que a nadie se le ocurra reproducirla).
• A veces, las grandes empresas ven a las ONGs como competidoras de su labor social. Esto no es bueno.
• Hay que especializarse. Hay que profesionalizarse. ¡Ah!, y hay que fomentar el voluntariado, sobre todo para dejar siempre muy clara cuál es la misión de las organizaciones sin fines de lucro. ¿Difícil? ¿Y quién ha dicho que gestionar una entidad de ese tipo es algo fácil?
• Tenemos todo un abanico de entidades, desde empresas con fines de lucro sin paliativos hasta todas las formas de entidades con fines sociales. Y hay que diseñar los medios para que todas colaboren y se apoyen.
• Las ONGs no deben basarse solo en donativos. Deben tener algo de «capital propio», que no es necesariamente dinero; algo así como los cuarteles de invierno a los cuales retirarse a pensar, cuando las cosas vienen mal dadas.
• ¿Hay lugar para un outsourcing de actividades, de las empresas a las ONGs y de las ONGs grandes a las pequeñas? No estoy seguro, pero es un reto.
• ¡Ah!, y no olvidemos a las administraciones públicas, a las que también debe llegar eso de repensarse, sobre todo en su acción social.
• Y, finalmente, la colaboración entre empresas y entidades sin fines de lucro debería montarse desde unos valores compartidos, y no desde unos planes de financiación, ni siquiera desde unos resultados,…