Este post parece interesado, pero no lo es. No estoy pensando en que me traten bien a mí: no tengo motivos de queja, sino todo lo contrario. Pero después de haber escrito, hace unos minutos, sobre el deterioro de la cultura y los errores en la dirección de algunas entidades financieras, viene bien recordar lo que dice Knowledge @Wharton: que «si quieres mejorar tu servicio a los clientes, trata mejor a tus empleados» (aquí, en inglés).
Bueno, ya está dicho todo. Hay empresas excelentes en la atención al cliente, y en el artículo se mencionan unas cuantas, incluyendo a Mercadona. ¿El secreto? Cuidar al empleado, que es, en definitiva, el que cuida al cliente. Cuidar su selección y contratación. Darle formación, mucha formación: no es una pérdida de tiempo o de dinero. Claro que sale más barato cambiar un empleado con contrato temporal con otro con contrato también temporal; pero, a la hora de la verdad, sale más caro. Ofrecer, continúa el artículo, incentivos, buenas carreras profesionales y otros beneficios. Y, sobre todo, dar autonomía y responsabilidad al que atiende a los clientes: son «sus» clientes, se debe sentir responsable de ellos, y entonces los tratarán bien, y los clientes responderán. «Los empleados y los servicios de atención al consumidor no son un coste; son un activo en el que hay que invertir». ¡Claro!
Muy bien post sigue adelante soy una lectora constante ya que quiero mejor mi
Seminarios de atencion al cliente y demas cosas relacionadas a negocios, ventas y vendedores
Me gustan ambos articulos, y pocas veces o ninguna hasta ahora, he podido decir que me gusta!
Si creo que todo lo expresado, tanto por Argandoña como Miravitlles, responde a una empatia mas que importante!
Coincido con el post en este caso, pero creo que cabe complementarlo. Creo que en el concepto de tratar bien al empleado hay que incluir otros conceptos que no señalas. Tratarlo bien es también ser sincero y franco con el. También lo es, no «consentirle» determinados «privilegios» en momentos en los que tiene capacidad de presión que, finalmente acaban volviendose en contra suya porque encarecen los puestos de trabajo y los hacen tan poco productivos que, al final, obligan a tomar decisiones drásticas. También ser exigente con la «competencia» y la calidad en el trabajo. Creo que en demasiados casos, «tratar bien a empleado» se ha confundido con cesiones continuas en su favor que lo situan en un nivel inasumible.