Una entrada en MercatorNet comentando el libro de Mark Shriver sobre su padre, Sargent Shriver, un político demócrata norteamericano de hace unas décadas (aquí, en inglés). Recojo solo algunas ideas, para hacernos pensar.
Una frase de Sargent Shriver a los estudiantes de Yale: «Romped el espejo. En nuestra sociedad, tan absorta en sí misma, empezad a mirar menos a vosotros mismos y más a los demás. Aprended más de la cara de vuestro vecino y menos de la vuestra». Para vencer el narcisismo en que nos hemos encerrado.
Otra, de 1963, sobre los valores espirituales en la política: «aunque la ley puede mover e incluso educar,… debemos fijarnos en esas instituciones cuya función es enseñar valores morales, reformular principios eternos,… y conformar la conducta diaria de las personas con los valores-guía de la justicia, el amor y de la compasión. Entre estas instituciones merecen ser destacadas la religión y la iglesia». Quizás nos puede ayudar a salir del bloqueo que nos lleva a considerar que la religión es algo dañino para la persona.
De un libro sobre Shriver, escrito por Ross Douthat: «No hay un enfoque cristiano de la política,… un libertario y un socialdemócrata pueden defender una posicion cristiana en los asuntos políticos, lo mismo que un conservador y un realista, o, para el caso, un monárquico y un republicano,… Precisamente porque no hay un único modelo cristiano de político, cada político cristiano tiene la obligación de ser un modelo… Esto es lo que Sargent Shriver hizo durante su carrera».
Y un par de frases del autor del artículo, R.J. Snell: «Los hombres y las mujeres que son buenos no tienen un conocimiento especial que sirva para resolver la pobreza o acabar con las guerras, pero son capaces de modelar las virtudes necesarias para valorar lo que merece ser valorado, cómo vivir tratando de conseguir valores genuinos y cómo colaborar con otros en ese intento. Es demasiado sencillo discutir acerca de esta o aquella política, sobre todo cuando esa política tiene una carga moral, perdiendo de vista los valores modelados por los bunos hombres y mujeres, cuando discrepamos de sus medios».
El camino de la virtud consiste en renunciar a la
arrogancia y a la soberbia.
Ante todo muchas gracias por tus «blogs »
El de hoy me permito comentar,que en la formacion de de la mayoria de nuestra juventud,falta esta proyeccion humana ,que tan necesaria es en la actualidad,especialmente en epocas de crisis.
Los que tenemos una cierta edad ,tuvimos una formacion que modelada por nuestra familia,nos ha permitido abrir el camino de la vida,superando los momentos dificiles que nos ha tocado vivir.