El principal problema de la economía española

Arriesgado título: ¿quién puede estar seguro de cuál es EL principal problema de la economía de un país? Pero el martes 15 de mayo, en una sesión para Antiguos Alumnos del IESE en Barcelona, titulada «Coyuntura económica: del corto al medio plazo», tanto la profesora Nuria Mas como el profesor Xavier Vives y yo mismo coincidimos: el estado del mercado de trabajo en España. Los motivos:

• Una tasa de paro demasiado alta, que no puede tener una explicación meramente coyuntural, cuando la economía está creciendo y la crisis parece superada.
• Demasiado paro de larga duración, que significa que los desempleados están sufriendo demasiado, y están perdiendo oportunidades de volver al mercado y volver a ser productivos.
• Demasiado paro de jóvenes. Incomprensible.
• Además, abundancia de subempleo, visto el número de trabajadores que tienen contratos a tiempo parcial pero que desearían tenerlos a tiempo completo.
• Fallo de los mecanismos para entrar en el mercado de trabajo, sobre todo los mecanismos públicos.
• Detrás de todo esto está el fracaso escolar y el abandono de la escuela por muchos chicos.
• Y una universidad que no cumple bien su función, con exceso de alumnos que luego no encontrarán el empleo adecuado para su cualificación (o sea, sobrecualificados).
• Fracaso de los mecanismos para volver al mercado, cuando uno tiene la desgracia de pasar una temporada en el desempleo (reciclaje, oficinas de empleo, etc.).
• Dualidad lacerante, que significa que hay unos privilegiados que disfrutan de contratos indefinidos con altos costes de despido, y otros que no tienen, ni tendrán durante muchos años, la posibilidad de tener un puesto de trabajo más o menos seguro.
• Por tanto, muchos están condenados a cadenas de contratos a tiempo parcial, sin medios para completar su formación ni adquirir las competencias que necesitan para saltar a puestos mejores.
• Salarios demasiado bajos, por dos razones principalmente: porque hay «exceso de oferta» (muchos parados que pugnan por encontrar un empleo) y porque la productividad es demasiado baja.
• Por tanto, el empleo y el desempleo juegan para crear una sociedad con altos niveles de desigualdad en la renta y, sobre todo, en las oportunidades.
• Y, al final de todo esto, un estado del bienestar que galopa hacia una situación de insostenibilidad, porque los gastos son crecientes (sobre todo las pensiones de jubilación) y los ingresos no.
• Y, ¿por qué pasa todo esto? Yo diría que es por el fallo de los que tienen obligación de solucionar esos problemas: los políticos (falta liderazgo y disposición para entrar a fondo en los problemas), especialmente los gobernantes; los sindicatos, que en lugar de preocuparse de los trabajadores solo cuidan de sus privilegios, y las patronales, que utilizan la estrategia laboral como barrera de entrada y de competencia.

Antonio Argandoña es Profesor Emérito de Economía del IESE.