En las empresas familiares consolidadas, los accionistas suelen abarcar distintas generaciones y no todos desempeñan un papel activo en el negocio.
En estos casos, las asambleas familiares son fundamentales al ofrecer un foro que reúne a todos los miembros para ponerles al día sobre la actividad y la estrategia de la empresa.
Las asambleas familiares permiten acortar las distancias entre los miembros que están al día sobre las operaciones de la empresa (generalmente, gerentes o directores que trabajan en ella) y los que están menos familiarizados con sus entresijos.
Lejos de las típicas reuniones de negocios, son encuentros familiares en los que se analiza la propia empresa familiar para aprender de sus logros, retos y aspiraciones.
Las asambleas familiares, más allá de compartir nueva información, deben crear un espacio común que inspire el orgullo de pertenencia, donde se escuchen y valoren todas las voces, tanto las veteranas como las nuevas.
Por desgracia, se convierten con frecuencia en sesiones interminables sobre balances financieros y planes estratégicos.
¿Cómo pueden las familias propietarias evitar esta dinámica y en su lugar ofrecer sesiones más interactivas sobre la visión y los valores de la empresa? Aquí recogemos cinco ideas a tener en cuenta:
1 – Involucrar a las generaciones más jóvenes
Implicar a los miembros más jóvenes de la familia distensiona el ambiente y subraya sutilmente la necesidad de planificar la sucesión e inculcar los valores y la cultura de la familia.
Los estudios lo corroboran: según el informe North America Family Business Report 2023 , la implicación temprana de los miembros de la siguiente generación aumenta significativamente su interés por proteger y conservar la empresa familiar.
2 – El poder de storytelling
Es aconsejable evitar las presentaciones cargadas de datos y métricas y en su lugar contar historias -el llamado storytelling- que resaltan el legado y los hitos de la familia. Las historias son más memorables que las estadísticas y fomentan un sentimiento de orgullo y conexión.
Este enfoque narrativo basado en datos empíricos aprovecha la conexión emocional de los miembros de la familia con la empresa, lo que aumenta enormemente el compromiso y la retención de información.
3 – Incluir aprendizajes experienciales
Las teorías del aprendizaje experiencial ponen de manifiesto el poder de la participación directa para reforzar la comprensión y los vínculos emocionales.
Por ello, las asambleas familiares pueden plantear la incorporación de visitas a las instalaciones o bien actividades manuales y prácticas.
4 – Fomentar el diálogo colaborativo
Los principios del aprendizaje colaborativo indican que la interacción en grupo fomenta una participación más activa y una mayor diversidad de perspectivas, lo que conduce a una comprensión más profunda y a la resolución de problemas.
Los moderadores o líderes de debate experimentados fomentan la participación y evitan que una o dos voces dominen la conversación.
5 – Incorporar elementos dinámicos
La gamificación con elementos interactivos como cuestionarios y juegos aumenta la motivación y la participación. Al mismo tiempo, asegúrese de que sean pertinentes, contribuyan a los objetivos de la reunión y no trivialicen el contenido importante.
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