Las empresas familiares desempeñan un papel fundamental en la economía mundial, impulsando cambios positivos al perseguir tanto objetivos financieros como la creación de riqueza socioemocional (SEW por sus siglas en inglés).
Desarrollada por el profesor Luis Gómez-Mejía, la riqueza socioemocional en la empresa familiar abarca una serie de factores no económicos como el control e influencia familiar, los valores, el legado, el orgullo de pertinencia, la visión transgeneracional, y la conexión emocional.
El doble papel de las empresas familiares como motores económicos y sociales ha suscitado un debate mundial sobre su capacidad para equilibrar eficazmente la SEW con los objetivos financieros.
En mi reciente investigación meta-analítica, exploro este tema en profundidad para arrojar luz sobre el complejo impacto que tiene la SEW en el rendimiento de las empresas.
SEW: una espada de doble filo
La SEW se percibe a menudo como una espada de doble filo. Aunque fomenta un profundo compromiso y un legado familiar positivo, también puede llevar a tomar decisiones que no siempre son óptimas desde el punto de vista financiero.
Dicho esto, nuestro estudio sugiere que los objetivos financieros y los de la SEW pueden ser compatibles entre sí.
El papel del SEW en las decisiones estratégicas
El deseo de proteger la SEW puede llevar a los propietarios a adoptar decisiones estratégicas conservadoras como la poca diversificación, la falta de alianzas estratégicas o la aversión al riesgo, lo que podría repercutir socavar los resultados empresariales.
Desde una perspectiva favorable, las empresas familiares pueden transformar su orientación hacia la SEW en una ventaja competitiva, creando nichos de mercado, fomentando lealtad y asegurando que las estrategias empleadas beneficien a diferentes grupos de interés.
La clave para los profesionales y propietarios radica en entender cómo sus objetivos socioemocionales influyen en las decisiones estratégicas que toman y encontrar un equilibrio que no comprometa los resultados a largo plazo.
Gobierno corporativo
Las empresas familiares que dan prioridad a la riqueza socioemocional podrían pasar por alto las mejores prácticas convencionales de gobierno corporativo, favoreciendo el control familiar frente a la experiencia de gestión externa. Curiosamente, nuestras conclusiones sugieren que este enfoque no siempre tiene un impacto negativo en el rendimiento.
Las empresas familiares deben considerar cómo su estructura de gobernanza apoya tanto los objetivos socioemocionales como los de rendimiento, integrando a miembros de la familia que posean la experiencia adecuada o incorporando a profesionales externos si es necesario.
Stakeholders más allá de la familia
Encontramos una correlación positiva entre la SEW y el compromiso con los stakeholders: las empresas familiares que prestan atención a las necesidades de otros grupos externos como los empleados, la comunidad local y el medio ambiente tienden a obtener mejores resultados.
En este sentido, los profesionales deberían considerar el compromiso hacia los stakeholders no como un coste, sino como una inversión que favorece la riqueza socioemocional y financiera de la empresa.
Sopesando las dimensiones de SEW para el rendimiento
Las distintas dimensiones de la riqueza socioemocional influyen en el rendimiento empresarial de distintas maneras. Mientras que el control y la identidad familiar y empresarial pueden impulsar el rendimiento al mejorar las relaciones con los stakeholders, otras dimensiones, como la sucesión dinástica, pueden producir resultados desfavorables.
Las empresas familiares deben identificar sus dimensiones más relevantes para sus estrategias y operaciones e integrar aquellas que se alineen con sus valores y objetivos a largo plazo.
Imagen en la home: Sean Stratton · Unsplash