En el blog «Economía con valores«, que los profesores del IESE desarrollamos en El País, publico hoy una entrada (verla aquí) sobre la deuda y las distintas formas que tenemos que quitárnosla de encima, como familias o empresas, como gobierno, como instituciones financieras o como país.
No hay muchas: Dejar de pagar (pero piénselo dos veces, que se le complicará mucho la vida), que otro se haga cargo de su deuda (oído, señora Merkel,… Nada, que no se entera), que la deuda pierda valor debido a la inflación (no vale: ni el Banco Central Europeo quiere provocar esa inflación, ni nos solucionaría el problema, porque nuestros tipos de interés subirán con la inflación, ya que nuestras deudas son a tipo variable), que aumenten nuestros ingresos (o sea, que crezca el PIB del país: pero ya me contarán cómo se consigue eso), o que nos apretemos el cinturón (la austeridad, que es lo que estamos haciendo, y que tendremos que seguir haciendo).
Profesor, un pedazo de post. Impresionante. Las cosas claras y el chocolate espeso. Muchas gracias por decir las cosas bien claritas.