Repensar el estado del bienestar

Los españoles estamos nerviosos ante lo que, decimos, es una agresión a nuestros derechos básicos, representados por el estado del bienestar. Bueno, como actitud defensiva me parece bien, pero en la situación actual de crisis económica esos derechos dejan mucho que desear. Nos los anunciaron, nos los hemos creído, pero no nos explicaron cómo se iban a financiar. Y ahora resulta que no hay dinero para todo. Leí ayer un artículo en que alguien criticaba a las políticas neoliberales por ese atropello de nuestros derechos. Bien, metamos en la cárcel a todos los neoliberales, pero sigamos buscando quién nos va a financiar nuestras pensiones, nuestra sanidad gratuita, generalizada y de calidad, etc.

Perdón por este comienzo. No pretendía volver a un tema que ya he comentado repetidas veces –el de que somos más pobres y no tenemos dinero para todo. De modo que hemos de elegir. Pero antes de hablar de qué partidas de nuestro estado del bienestar vamos a conservar, me gustaría referirme a algunas consideraciones que, me parece, deben ponerse sobre la mesa, a la hora de tratar cuál es el mejor medio de definir esos derechos.

Una: hemos de empezar a pensar en renunciar a la política consistente en que «todos tenemos derecho a todo», para empezar a establecer prioridades: habrá gente para la que la escuela deba ser gratuita, y otros que paguen algo, y otros que paguen mucho. Porque esa política de todo gratis para todos no es realista –no es sostenible–, ni justa, ni eficiente –lleva al despilfarro. Las prestaciones no tienen por qué ser uniformes para todos.

Otra idea: gastar más no significa mejor servicio. Debemos recibir ayuda cuando experimentamos una necesidad grave, que no hayamos podido prever o cubrirnos de ella: una temporada en el paro (no hay seguros privados contra esta emergencia), o una enfermedad grave, o el incendio del piso… situaciones todas ellas que pueden lanzar a una familia a la miseria. Esto es lo que hay que cubrir, sobre todo; las aspirinas nos las podemos pagar, al menos la mayoría de ciudadanos. Eso es lo que vieron los que introdujeron el Estado del bienestar en Alemania el siglo XIX, en España el siglo XX. Vale la pena que recordemos todo esto, para hacer el estado del bienestar más sostenible, más eficaz y más justo.

Otra más, esta para las administraciones públicas: lo importante no es lo que la oficina pública X hace para sus beneficiarios, sino lo que estos reciben de todas las oficinas públicas, más las empresas privadas, más las entidades sin ánimo de lucro, más las familias. En frase de Guillem López Casasnovas, a quien ya he citado otras veces, no importa quién lo hace, sino para quién (no es literal, pero me parece que recoge su idea).

7 thoughts on “Repensar el estado del bienestar

  1. Querido Antonio :Con el paso del tiempo, especialmente, cuando uno se va haciendo mayor, se vuelve muy observador, es entonces cuando uno comienza a descubrir, los errores de funcionamiento de una sociedad, pero cuando uno intenta decirles a los jòvenes que eso no esta bien, estos no te escuchan, porque dicen que tienen muchas cosas que hacer y cuando uno les dice que asi no se va a ir bien, le contestan que la vida esta asi, o corres o te hundes y siguen corriendo, pues hay que comer, pagar la hipoteca, el colegio de los niños et, etc. y en consecuencia todo sigue igual, es decir seguimos por la senda equivocada, hay un amigo nuestro que decia» las crisis de hoy son crisis de santos»y eso es lo que pasa, eso que se aplica con mucha sabiduria a la formaciòn espiritual no se dan cuenta que son aplicables a todos los campor de quehacer, dentro de ellos , el de la economia,en mi manera de pensar, hay que parar esto no puede seguir asi, vamos directo al precipicio, hay que parar y comenzar por la base, y la base no es otra que los principios morales, por los cuales una sociedad debe regirse, la culpa es nuestra, porque nosotros fuimos los primeros en comenzar esa carrera, ellos la han heredado.Por lo tanto creo yo que debemos comenzar por la base, y la base no es otra que los valores, eticos,econòmicos, justos, sino hacemos esto, la que viene es peor, si uno estudia la historia del mundo, siempre triunfaron aquellas sociedades cuya base era un pensamiento justo, eso les llevaba a un orden y eso les llevaba a dominar a los demàs y cuando eso, es decir esos principios se olvidaban o se dejaban de lado venia la decadencia y hoy por desgracia volvemos a los mismo, no solucionaremos esta crisis sino cambiamos nuestros valores èticos, hay que volver atràs y con la medios actuales seguir adelante, sino iremos de mal en peor.

  2. La reflexión me parece bastante inapelable, si asumimos que somos más pobres, tenemos que decidir a que renunciamos respecto de lo que veníamos disfrutando.
    Ahora ese dejar de disfrutar nos duele, CLARO, pero reaccionamos buscando culpables, a los que adjudicamos la responsabilidad del retorno a la situación anterior. Como dice Argandoña, los podemos encarcelar; o, pasar por las armas, añado, y ¿Qué?
    Desde la atalaya de mi edad observo que hay una especie de infantilización en el sentido de que unos entes superiores/padres nos deben sacar del atolladero. Nuestros abuelos, seguramente agricultores en buena parte, sabían que el futuro dependía de ellos, de su trabajo; y también de la naturaleza, meteorología, etc., pero no se les ocurría pensar que alguien les iba a salvar. Confiaban en ellos y por si acaso rezaban a Dios.
    Ahora si nos embarcamos en un viaje por zonas peligrosas, o escalamos una montaña, o nos embarcamos en un proyecto, esperamos que si nos secuestran, nos caemos, nos la pegamos; el papa estado nos debe sacar a cualquier precio; y contamos ante las camaras, una vez resuelto el caso, que nos han tratado mal, no nos han dado información suficiente, etc.
    El progreso nos ha traído seguridades que no eran soñadas, pero no nos debe sustraer de la responsabilidad de nuestro destino.

  3. Buenas noches,
    El titulo del articulo me parece muy sugerente. Efectivamente, se debe repensar nuestro estado de bienestar, o desde un punto mas amplio nuestro propio bienestar, es decir, como y de que forma vivimos. Seguramente, es un ejercicio individual y personal, pero cuando nos referimos al estado, ya no tengo tan claro a quien le encomendamos la misión de replantear el bienestar colectivo.
    Me siguen preocupando los valores y la ética de los que deben pensar y repensar nuestro modelo, y sea quien sea, deben garantizar grandes aptitudes pero también actitudes.
    Aprovecho para felicitarle por el foro, no solo por el contenido de sus artículos sino por los comentarios de sus lectores. Sin duda, el interés por el blog va en aumento, no solo en cantidad de lectores sino también en la calidad. Le animo a que siga, pues los grandes cambios empiezan con pequeñas grandes iniciativas.saludos cordiales

  4. Estoy de acuerdo con la entrada. Somos más pobres, pero si todos nos dedicamos a guardar nuestro dinero… De tanto hablar de crisis, hemos caído en la crisis

  5. Gracias. Costará, pero … precisamente por eso. Cuesta asumir la realidad, ponerse a las cosas … A trabajar.

  6. Estimado profesor Argandoña ,hoy voy a disentir plenamente y con argumentos ,voy a comenzar sobre lo que llamo el valor de 1, el estado de bienestar minimo no puede ser renunciado por la poblacion,hay una vida para vivir , una edad para trabajar,una edad para ser apto y buscado por el mercado y otra para ser ignorado y postergado por nuevas generaciones,entonces hay 1 edad para criar los hijos,1 edad para criarlos y educarlos,1 edad para ser valioso y a cambio que,damos esa edad y se nos pide aun resignacion a los minimos derechos de salud , educacion y vivienda,seguimos aplicando adentro lo malo que viene de afuera y queriendo hacer `pagar ese mal a la gente , me refiero a un problema de base global,no local,las raices son los cambios aca en argentina somos el tubo de ensayo de todas las teorias y absurdos,desde el 90 en adelante,la libertad de mercado es necesaria para sincerar los valores ,pero dar libertad y predominio sobre el mercado,es otra cosa , es pernicioso,ejemplo,aca los supermercadistas locales,ante la apertura de la economia en el 90,previendo que no podrian competir, vendieron a las grandes cadenas internacionales, alli nacio la raiz del cambio perverso,el anterior mercadista con respeto pagaba sus cuentas a proveedores loacales , sus ingresos circulaban en forma local a travez de salarios y de reinversion en nuevas sucursales,o sea el circulante activaba todo el aparato productivo local,porque digo cambio perverso,cuando llegaron estas cadenas y grandes hiper, que ademas compraron las cadenas chicas de supermercado generando 3 grandes monopolios,si les querias vender debias abastecer sus gondolas de todas sus sucursales,pagarles con mercaderia la inversion de sucursales y la remodelacion de las mismas y luego recien tenias ingreso de la reposicion nueva,tengo un caso que debian cobrar una factura de 1590 dolares en el 1 a 1, y solo le liquidaron 390 de esta descontando en el pago remodelaciones,cuando se instalaron estas cadenas, cuando entro la importacion a travez de exportadores,los productos chinos hicieron trizas la industria local , como competir, tienen salarios que el mundo no permite,no tienen democracia, no tienen sindicatos y los productos malayos e indonesios junto con estos chinos barrieron la industria,no les paso a uds. algo igual o similar,al mismo tiempo brasil dio energia gratis por 5 años ,y 5 años sin pagar impuestos y terrenos gratis, eso dejo out el panorama,a que voy con esto,hoy la plata que circulaba se va al otro dia afuera, dueños externos , cada hiper que vende carnes, significa que no existen 90 carnicerias,cada hiper que vende herramientas chinas anula 40 ferreterias, el problema esta en el predominio de poder global de estas cadenas y la imposibilidad de competir localmente,como equilibrar ese desequilibrio es la pregunta,como permitir la existencia de unos y otros sin ventajas comparativas reales ,chile que es un paladin del libre mercado, prohibe y castiga por ley la venta a 2 precios del mismo producto, es decir no existe la ventaja del volumen,para mi ese es un factor global a enfrentar y la de la atomizacion de la oferta,mientas mas gente participe en el circuito de abastecimiento,mas gente vivira de el, porque permitir al fuerte economicamente manejar todos los rubros, desplaza al debil de los mismos,que falta para saber que lo que se gasta alla ,no se gasta aca,que el alcance de mejores precios por pobreza o ventajas politicas de lugar de origen,permiten arrasar con el derecho de calidad de vida del resto de los paises,como lograr un equilibrio de vida donde no hay equilibrio de condiciones y posibilidades a nivel global,insisto el problema debe abarcar mas que eso,una estrategia global ,enmarcar la necesidad de trabajo de las poblaciones segun geografia y amplitud demografica,habilidades , ventajas naturales y culturales y solo despues de eso regular el comercio exterior, el valos de 1 , es importante a tener en cuenta en todos los paises.

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