Llevo ya una temporada en que me ha dado por la educación, como el lector habrá podido comprobar. Leo hoy un artículo de Fabricio Caivano en El Periódico, con el título de «Educación, crisis y mercado» (ver referencia aquí; el lector no tendrá acceso si no es suscriptor). Suscribo casi todo de los primeros dos tercios del artículo, donde habla de el deterioro de los valores, el desprestigio de la autoridad, etc. Pero llego a la última columna y me entero de que el gran problema aquí es el Mercado (con mayúscula): «El tener ha ganado la partida al ser y el capital ha derrotado al trabajo». Esto enlaza con una frase del principio del artículo: «¿Es imaginable una Educación capaz de poner al Mercado en su sitio si los Políticos no osan hacerlo desde su legitimidad democrática?».
La verdad es que no entiendo quién es el Mercado, que de tal modo se opone a la Educación (con mayúscula también). Parece como si el pueblo llano fuese en todo limpio, honrado, ético, y luego viniese el Mercado y lo estropease. Eso de pensar que el Mercado es una fuerza oscura, representativa de intereses inconfesables, que echa a perder a las personas, me parece una magnífica excusa para pedir que los Políticos (también con mayúscula) tomen, de una vez, cartas en el asunto (cosa que no podrán hacer, porque están corrompidos por el Mercado, claro).
Sugiero una interpretación alternativa, que venía sugerida por Keynes hace ya muchos años: las personas somos deudoras de pensadores quizás ya fallecidos, cuyas ideas compartimos, aunque no somos conscientes de ellos. ¿Son los intereses del Mercado los que nos arruinan la moral, o son quizás las ideas de filósofos que nos han propuesto un modelo de sociedad basado en el disfrute, en la vida cómoda, en querer tenerlo todo inmediatamente,…? O, dicho de otra manera: ¿funcionaría de otra manera nuestra sociedad, en buena parte egoísta, relativista, emotivista y utilitarista, con un mercado (ahora con minúscula) controlado por unos Políticos egoístas, relativistas, emotivistas y utilitaristas? Porque los Políticos son parte de los ciudadanos, no lo olvidemos.
Quizás está resucitando la vieja tesis marxista: cambia el sistema económico y cambiarás el mundo. ¿O deberíamos leer más descripciones sobre la vida en los viejos paraísos comunistas? ¿Había allí una Educación basada, como pide el autor, en la dignidad de la persona? ¿O quizás el problema estaba en las ideas, en la filosofía de la vida, y no en las instituciones?
Interesante punto de vista, se puede debatir mucho sobre la cuestión, pero a fin de cuentas los poliíticos trabajan principalmente para salvaguardar los intereses privados de capitales PRIVADOS.
Pienso que reccionaremos cuando los políticos vayan a por la salud y educación (ya lo están haciendo) es decir, cuando corten de raíz esa bonita idea del «estado de bienestar» que es lo que ya empiezan a dejarnos ver en los medios de comunicación.
LA TENTACIÓN DE LAS SOLUCIONES MÁGICAS: DEBATE SOBRE LA CRISIS FINANCIERA INTERNACIONAL
La nota publicada el pasado 24 de octubre por la Pontificia Comisión Justicia y Paz titulada: “Por una reforma del sistema financiero y monetario internacional en la perspectiva de una autoridad pública con competencia internacional”, abrió el debate sobre una cuestión compleja de la cual participan no sólo cuestiones técnicas sino también ético-morales.
En el artículo que hoy publicamos, Pablo López Herrera reflexiona sobre la “tentación de las soluciones mágicas” preguntándose: ¿Existen soluciones integrales para resolver problemas económicos de alta complejidad? ¿Qué función podría desempeñar eficazmente un sistema financiero global? ¿Por qué parece darse menos importancia en medios religiosos al factor moral en el proceso de creación o destrucción de riqueza que a las técnicas de ingeniería social? ¿Cuál es el verdadero papel del Estado en la creación y distribución de la riqueza? ¿Está el ambiente político como para cometer grandes imprudencias? ¿Tienen las finanzas características peculiares que las hacen diferentes de otras actividades económicas? Y finalmente: ¿Tendría sentido buscar formas de evaluación de los criterios morales para tomar mejores decisiones económicas?
http://iifv.wordpress.com/2012/01/15/la-tentacion-de-las-soluciones-magicas-debate-sobre-la-crisis-financiera-internacional/
Que buen punto el que destacas Antonio. Para mi al mercado mismo en sí no se le puede atribuir la responsabilidad de los hechos. Quienes controlan el mercado si pueden aducir a ello, porque no podemos negar que a diario éste se somete a una manipulación de quienes poseen el control y van delimitando la ruta que toma la sociedad día a día. El punto es, si desd esa base el mercado controla muchas cosas (por no decir que casi todo), como esperar que se dé una reorganización de nuestro entorno si el mercado colapsa?.. seguiran los mismos protagonistas en control bajo otro sistema artificial creado así como lo fue el mercado? Saludos! 🙂