En una entrada anterior expliqué cómo pueden ser confiables las empresas, tema que desarrollé en una sesión en la sede del IESE en Barcelona, que celebraba el décimo aniversario de la Cátedra «la Caixa» de Responsabilidad Social de la Empresa y Gobierno Corporativo. Una vez explicado lo que ha de hacer la parte que trata de presentarse como confiable, pasé a explicar qué hace la otra parte, a saber, los empleados, clientes, proveedores y otros stakeholders.
Desde este punto de vista, la confianza es una esperanza subjetiva acerca del comportamiento de la otra parte, la empresa, en nuestro caso. La confianza se concede, se otorga, cuando el que confía está seguro de que la empresa puede hacer lo que se espera que haga, que está dispuesta a hacerlo y, en concreto, que está dispuesta a poner los intereses legítimos de la otra parte por delante de los suyos (y de los empleados o directivos que actúan en su nombre, porque, en definitiva, la confianza no se otorga a una persona jurídica, sino a las personas de carne y hueso que la representan). De modo que el que da su confianza a la empresa se hace vulnerable ante ella.
Obviamente, la confianza que se da a una empresa depende de la confiabilidad de la empresa, pero también depende de la persona que otorga la confianza: de su visión de la persona humana y de las organizaciones, de su bagaje cultural, su formación, su carácter y sus virtudes, y de sus experiencias. Por supuesto, la confianza admite grados, puede crecer y puede decrecer y aun desaparecer.
Si se crea una relación mutua de confianza, las dos parte comparten algunos valores; trabajan en equipo; se genera lealtad entre ellos (la lealtad es hacer honor a la confianza depositada cuando se producen conflictos motivacionales); se pasa del cumplimiento a la cooperación, a dar sin recibir, a funcionar con valores más que con garantías... Y esto a pesar de que la otra parte puede no responder.
Al llegar a este punto, entré en el tema central de mi presentación: ¿puede la Responsabilidad Social costruir confianza entre la empresa y sus stakeholders? Pero de este nos ocuparemos otro día.
Los Comentarios de la Cátedra son breves artículos que desarrollan, sin grandes pretensiones académicas, algún tema de interés y actualidad sobre Responsabilidad Social de las Empresas.