Empecemos el año con Paz
Hoy empezamos este año 2015 con la festividad de la Virgen-Madre de Dios, y el Día Mundial de la Paz. Paz en el interior de las personas (aquí tenéis un link a la propuesta del Beato Álvaro para lograrlo), paz en las familias, paz en las sociedades en guerra y, especialmente, en las comunidades cristianas de Siria e Irak, que siguen con la persecución, el asesinato, la tortura y el éxodo masivo.
Hoy me gusta recordar una historia real sobre la Paz, que nos trae de nuevo la esperanza en el ser humano que, desde su libertad y con valentía, supera las estructuras de confrontación y guerra fratricida entre europeos. Siempre debería ser Navidad…(más abajo tenéis el vídeo).
Juan Pablo II, nos exhortaba a todos los europeos desde Santiago de Compostela en 1982, hace ya 32 años: «Te lanzo, vieja Europa, un grito lleno de amor: vuelve a encontrarte. Sé tú misma. Descubre tus orígenes. Aviva tus raíces. Revive aquellos valores auténticos que hicieron gloriosa tu historia y benéfica tu presencia en los demás continentes. Reconstruye tu unidad espiritual, en un clima de pleno respeto a las otras religiones y a las genuinas libertades. Da al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios. No te enorgullezcas por tus conquistas hasta olvidar sus posibles consecuencias negativas. No te deprimas por la pérdida cuantitativa de tu grandeza en el mundo o por las crisis sociales y culturales que te afectan ahora. Tú puedes ser todavía faro de civilización y estímulo de progreso para el mundo”. Entonces el Papa explicó cómo, en torno a Santiago, se ha constituido el alma europea: ”Desde los siglos XI y XII, bajo el impulso de los monjes de Cluny…»(para seguir leyendo el artículo seguir este link).
Por su parte, el Papa Francisco, habló en el Parlamento europeo de la Europa envejecida por el individualismo, y la falta de una antropología que entienda la dignidad trascendente del ser humano. «Una Europa que no es capaz de abrirse a la dimensión trascendente de la vida es una Europa que corre el riesgo de perder lentamente la propia alma y también aquel «espíritu humanista» que, sin embargo, ama y defiende». (Os animo a leer el texto completo aquí)
Obrigada!!!!!!!!!!!