VALORES EN ACCIÓN

Cómo ser los agentes de cambio en un mundo en transición

Maruja Moragas dejó una huella profunda en todos aquellos que la escuchaban en sus conferencias o trabajaban con ella. La claridad, la preparación, la dedicación y el conocimiento de la naturaleza humana eran sus señas de identidad. Para conmemorar el décimo aniversario de su partida, hemos puesto en marcha un ciclo de tres sesiones conectadas, que dan una imagen panorámica y a la vez profunda del legado que nos dejó esta gran persona.

Nos quejamos con frecuencia de que hay una cultura contaminante y contaminada, que va generando una sociedad desvinculada. Es la sociedad líquida de la que habla Bauman, en la que la incertidumbre y lo vertiginoso de los cambios termina por debilitar los vínculos humanos. Las empresas que actúan en esta sociedad desvinculada son más mecanicistas y cortoplacistas, centradas en el beneficio económico y poco abiertas a considerar en sus decisiones de negocio las necesidades de los empleados. Todo ello reduce las posibilidades de desarrollar vínculos fuertes en el entorno personal y familiar de los empleados, dando lugar a familias y personas débiles, desvinculadas y rotas.

La cultura dominante en esta sociedad cortoplacista es tóxica para la persona, y por eso hablamos de sociedades contaminadas y contaminantes: es un círculo vicioso que termina por romper los vínculos de confianza y el bienestar de los seres humanos. Es fácil quejarse de la situación y trasladar la responsabilidad a otros: la situación, el gobierno, los agentes económicos… Sin embargo, es posible dar la vuelta a la situación, convertir este círculo vicioso, contaminante y tóxico, en un círculo virtuoso y oxigenante. La forma de conseguirlo es actuando sobre el centro mismo de este círculo, la persona.

Una persona equilibrada, que sabe formarse y seguir creciendo a lo largo de la vida, consigue crear una familia sólida, desarrollando vínculos estables de confianza y amor. Estos lazos se construyen tomando las decisiones correctas, es decir, poniendo en valor los criterios adecuados. Precisamente esos criterios, que nos hacen ser más libres y mejores personas, son los valores en acción a los que hace referencia el título de este blog y del ciclo de sesiones con el que hemos conmemorado el X In Memoriam Maruja Moragas.

A continuación os dejamos los enlaces a los tres vídeos de las tres sesiones que han integrado este In Memoriam 2023.

  • Ellos y Ellas: igual dignidad en la diferencia

Blanca Castilla de Cortázar, Catedrática de Antropología

Análisis profundo de la persona, lo que significa ser varón y ser mujer y la relación entre los conceptos de igualdad, desigualdad, diferencia y dignidad.

  • ¿Familias imperfectas?: Como convertir los problemas en retos para seguir construyendo

Mariolina Ceriotti, Neuropsiquiatra y Psicoterapeuta

  • Valores necesarios para construir empresas competitivas, familias sostenibles y personas felices

Prof. Nuria Chinchilla y Prof. Esther Jiménez

Visión global de la interrelación entre las diferentes esferas (persona, familia, empresa y sociedad) y la toma de decisiones como elemento clave para el crecimiento personal, familiar y profesional. Exposición sobre cómo los valores se ponen en acción a través de las decisiones que tomamos, haciéndonos más libres y mejores.

 

Aquí dejamos algunas publicaciones para profundizar en los temas expuestos por nuestros ponentes:

 

 

Dignidad personal y condición sexuada, Blanca Castilla de Cortazar, TIRANT HUMANIDADES, 2017

 

 

La familia imperfecta: como convertir los problemas en retos, Mariolina Ceriotti, Rialp 2019

 

 

De la mano de las mejores, Nuria Chinchilla, Pilar Garcia y Esther Jimenez, EUNSA, 2022

 

 

Gracias, Maruja

www.marujamoragas.com

 

Recibe el blog de NCH en tu buzón

Un comentario

  1. El cortoplacismo es una de las tendencias más preocupantes y más perjudiciales de la sociedad actual y, diría yo, específicamente de la sociedad occidental actual.

    Es terrible en todos los ámbitos, pero resulta especialmente preocupante en la política, porque provoca que no haya el menor compromiso con el progreso sostenido, que se sustituye por objetivos inmediatos sin preocuparse por el precio a pagar a largo plazo. Y esto, lógicamente provoca la frustración y la desconfianza de la gente de a pie con el sistema.

    Urge un cambio en el enfoque, cuanto antes mejor.

Entradas recientes