El día en que yo cambié
Los grandes personajes en la historia que han impactado y siguen impactando al mundo han tenido que enfrentarse a circunstancias difíciles en las que han dado ejemplo de superación y liderazgo. Walt Disney es uno de ellos. Aquí tenéis un bonito vídeo en el que él mismo nos cuenta con bellas palabras (link al texto completo) e imágenes de sus entrañables películas el día que cambió de paradigma. ¡Gran lección para todos!
En la Cumbre Mundial de RSC, donde estoy exponiendo sobre la RFC, la Responsabilidad Familiar Corporativa como parte esencial de la RSC interna, he tenido la alegría de encontrarme con Fernando Prado, antiguo alumno del MBA de IESE-97. Como DG de Reputation Institute de Iberia y Latam, nos ha recordado en su exposición que Walt Disney es la segunda empresa mundial en Reputación Corporativa y que las condiciones de trabajo, la integridad (Governance) y la ciudadanía (apoyo al medio social y al medio ambiente), suponen más del 40 por ciento de la buena reputación corporativa. Para ello hay que explicar lo que se hace en esos temas en las empresas. Interesante…
Tengo en mi historia un enfrentamiento con Walt Disney. Reconozco su legado pero me duele lo poco que hemos hecho en esa materia quienes tenemos una visión antropológica más rica. Walt Disney fue un genio pero nos dejo con la boca abierta y no aprovechamos los dibujos animados para transmitir mejor la realidad de nuestra existencia, como seres creados por Dios con un destino superior. Walt Disney era pantéista y no alcanzó la trascendencia. Hizo todo lo que pudo pero se nos quedó corto y no hemos sido capaces de añadirle ese ++ que nos pide su obra. En mi país, hoy convertido en un a curiosa mezcla de castrocomunismo con lucha de clases, negación de la justicia social y materialismo enano, tuvimos unas décadas Disney que estamos pagando. Nuestros niños y jóvenes preferían ir a Disney Word antes que conocer el Salto Angel o las Montañas nevadas de Mérida o los amaneceres del Llano. No sembramos verduras y hortalizas porque el oro negro (petroleo) nos permitia irnos lejos. Los niños no habían visto nacer un pollito en una granja o un corral familiar pero se abrazaban a Mickey en los vuelos charter que ofrecía el mercado, La era del ta barato dame dos fue también la época Disney. Y así estamos hoy. Debatiéndonos entre el dinero de unos pocos y la pobreza de muchos. La industria destrozada y las importaciones a marchas forzadas. Es de dominio internacional que el venezolano debe hacer cola para todo. En un sitio encuentra harina, en otro azúcar, en otro leche y arroz . Dólares por ninguna parte. El regulado no se encuentra y el libre o negro está por la estratosfera.
Lo que se ha hecho en el vídeo con las figuras de Disney , tenemos que repetirlo de mil formas con gente de carne y hueso que nunca ha sabido de amor ni mericordia, que hoy saben de represión y no encuentran por donde ir hacia la libertad. Ayúdanos Nuria a seguir en la lucha. Tu puedes, tu quieres, tu sabes cómo…pero Disney en su lugar, que no es tan santo aunque muchos se diviertan y descansen con ánimales….BBP
que excelente post Nuria! Son cosas que es necesario refrescar siempre!!!
CAriños!
Cecilia
En la música también hay el ejemplo de grandes figuras que no abandonaron.
Al pobre Lang Lang, después de que lo echaran del conservatorio con muy pocos años, su padre le dio dos opciones : tirarse por la ventana o tomarse un frasco de pastillas. Afortunadamente optó por estar un tiempo sin tocar el piano y luego volver. Y mira donde está ahora. Quien se lo hubiera dicho a su padre.
Por otro lado, Rubinstein se llevó el chasco de su vida cuando escogieron a otro pianista para tocar el número 1 de Tchaikovsky para una importante grabación. Ese concierto es un sueño para cualquier pianista que quiere ser una estrella.
Además estaba tan convencido de que se lo iban a dar, que lo había estudiado de principio a fin. Pero no fue así. Le ofrecieron entonces grabar el 2 de Saint Saens, que no llega ni mucho menos al nivel de aquel gran concierto y se lo tuvo que estudiar en tres días, dentro de su total decepción. Pasado un tiempo, se convirtió en el disco clásico más vendido en USA, sin ser ni mucho menos una de las obras más conocidas ni agradecidas del género.
En la vida, nunca se sabe por donde sonará la flauta, pero hay que estar ahí. Si estás, la oportunidad llega. Aunque siempre pensemos que hay otros con más suerte que nosotros.
Gracias Nuria por este hermoso mensaje que trataremos de enseñar de la forma mas positiva.
Comparto muchísimo de lo que plantea mi querida amiga Beatriz Briceño, sin embargo, considero que le problema de los venezolanos no está en Disney, está en nosotros como venezolanos, y hablo como venezolana…cada cultura, cada país, tiene que plantearse cuáles son sus raíces y profundizarlas y seguirlas.
Los venezolanos hemos sido y somos, muy superficiales, y esto no es responsabilidad de Disney…fueron los padres quienes alimentaron el esta barato dame dos, o el ir a Disney World…escuché decir a algunos papás que tenían que llevar a sus hijos a Disney porque todos los amigos de sus hijos habían ido…estimada Beatriz, te das cuanta tamaña superficialidad…así formamos a nuestros niños…no eran ellos…eran sus padres…insisto cultura de la superficialidad…del facilicismo…y eso lo hemos fomentado nosotros los venezalnos…no fue Disney el hizo lo que pudo y lo que creyó y en lo que creía…
Un abrazo afectuoso para mis dos queridas amigas…
Rosalba Bortone
Es realmente bonito y emocionante.
Mantener las esperanzas y los sueños, ser consciente de la oportunidad que nos da el amor y la bondad hacia una renovación constante.
No deberíamos dejar perder nuestra parcela de ser in poco niños .
Muchas gracias Nuria!!!
!Precioso post Nuria!.
Cuando encuentro tiempo de rastrear perlas, encuentro estas joyas.
Me ha encantado el texto de Walt Disney. En mis conferencias, utilizo una slide de Walt, es simplemente genial y no muy utilizado.
Tiene unas frases muy impactantes y llenas de sentido, pero el texto que adjuntas lo desconocía y me parece sobrecogedor.
Gracias por compartirlo.
Un saludo.