Mirar al mundo con ojos de Mujer
Este fue el lema de las asociaciones de la Cuarta Conferencia Internacional sobre la Mujer de Beijing, en 1995. Animada ya entonces por los directores del IESE, tuve la suerte de participar en ese gran evento, al que asistí con mi marido. En este 2015 se celebran los 20 años de dicha conferencia. (link a las conferencias de la ONU).
Una de las conclusiones (link) fue que al mundo social, político y económico, le faltaba la visión femenina. Hombre y Mujer son dos modos de ser persona, llamados a complementarse. Por ello, el avance de la mujer en estas esferas era y sigue siendo tan importante. Es lo que se ha venido denominando el “empoderamiento de la mujer”. A lo largo de estos años, hemos visto que este empoderamiento no puede comportar la masculinización de las mujeres, porque entonces no se consigue lo que se pretendía: construir un mundo más humano con la participación corresponsable de ambos.
Con este objetivo, hemos estado trabajando con mujeres desde el ICWF y desde todas nuestras actividades en el IESE Business School, durante los últimos 20 años.
Aquí podéis ver mis primeros escarceos, en lo que se llamaba Boletín de Antiguos Alumnos del IESE en 1984, con el artículo «La mujer y el trabajo«(link), y otro del año 1995, con el artículo «¿Pintamos algo las mujeres en el mundo empresarial?«(link), justo a la vuelta de la Conferencia de Beijing. (¡No vale reirse de las fotos!, como podéis ver ya he echado raíces…).
Desde la ONU se pide que el 2015, Beijing+20, sea un año dedicado a los derechos de las mujeres. El Consejo exhortó a los Estados Miembros de la ONU a llevar a cabo exhaustivas evaluaciones nacionales, y alentó a las comisiones regionales a llevar a cabo exámenes regionales en torno a estos derechos. Serán interesantes las conclusiones que se debatirán en Nueva York durante la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer (link) del 9 al 20 de marzo de 2015, en la que participamos el año pasado (vid. post anterior «Las 3 Fs para el avance de la mujer en la ONU»).
Las mujeres en los Consejos de Administración son uno de los ámbitos en los que se ve necesaria y muy conveniente dicha complementariedad, no sólo por diversidad, sino por negocio (ver antiguo post de este tema «Cuota o negocio»). Tomando como ejemplo Londres, ciudad de negocios por antonomasia, a pesar de las políticas de retención del talento, las mujeres seniors van abandonando sus carreras ejecutivas en números considerables, hasta hablar de “Sexismo en la City” (Link al artículo del Financial Times): sólo una de cada 5 personas seniors es mujer en la City. Para remediar la ausencia de mujeres, en sus recientes declaraciones al Financial Times, Ana Botín, Presidenta del Banco Santander, propone la necesidad de que en los procesos de selección final o terna, haya al menos una mujer, lo que en la actualidad no pasa. Enhorabuena porque estas declaraciones son las que van creando opinión y cambiando hábitos necesarios.
Ana Botín se encuentra ahora en Davos, en el World Economic Forum, donde a pesar de los esfuerzo de los organizadores por intentar imponer una cuota de mujeres a las corporaciones participantes, este año sólo asisten el 17 % de mujeres (link).
El próximo 3 y 4 de febrero, en el Campus de Madrid, empezamos la V edición del Programa Enfocado del IESE para Mujeres consejeras o Consejables (link) que quieran profundizar su formación para aportar más en los Consejos de Administración, actuales o futuros, creando sinergias positivas, que afecten a los 3 balances de la empresa: el económico-financiero, el social y el medio ambiental.
Totalmente de acuerdo.
Me parece más urgente que nunca.
Habrá que ayudar a concretarlo en acciones y políticas que busquen este objetivo de verdad.
Un saludo muy grande desde San Sebastián,
Rafa
Comparto tus opiniones y los objetivos que se pretenden y que considero son de una lógica aplastante, pero que se demoran en exceso, con las consecuentes pérdidas de todo tipo para la Humanidad.
Un cordial saludo desde los Pirineos,
RMG.
Estoy de acuerdo, lo mejor que puede ocurrir es que en todos los ámbitos se complementase los distintos puntos de vista.
Genial artículo! El empowerment femenino aporta y complementa poder de decisión desde el equilibrio hacia valores y resultados globales y sostenibles.
Comparto plenamente las ideas expuestas en el artículo de Nuria.
Desde todos los países debemos ocuparnos de acciones educativas en torno a este tema.
Un saludo desde México
¡Cuántos datos relevantes, Nuria! Los he asociado a una idea que expuso ayer Itamar Rogovsky (#DOItamar) en su conferencia anual: la cultura actual, basada en valores masculinos, es «hacia afuera» (acción, potencia, competencia…) y estamos transitando hacia una cultura basada en valores femeninos, «hacia adentro» (arropar, animar, cuidar, estimular…). Cuando consigamos un equilibrio más o menos estable las mujeres estaremos en igualdad con los hombres, también en el mundo del trabajo
Querida Nuria, no he conseguido accesar a tus dos links:
«Aquí podéis ver mis primeros escarceos en lo que se llamaba Boletín de Antiguos Alumnos del IESE en 1984 con el artículo “La mujer y el Trabajo”(link) y otro del año 1995 con el artículo “¿Pintamos algo las mujeres en el mundo empresarial?”(link)»
No sé si he sido la única o si hay algun problema electronico…
Caso sea la unica, Me los puedes mandar por email? Mil gracias desde Rio de Janeiro!
HOLA NURIA:
Como siempre tus analisis y sentencias son magistrales.
Te he comentado en algunas ocasiones en el IESE que no entiendo
«Que siendo la mujer un ser superior al hombre tenga tan poca
autoestima».
Me he propuesto y lo estoy haciendo, investigar del porque de mi afirmación.
Si llego a alguna conclusión, te lo contare.
Gracias por compartir esto con todos. 🙂