La cruz en Europa: ¿Justicia o Ideología?
La decisión del Tribunal de Estrasburgo que obliga a retirar el crucifijo de las aulas en Italia, me ha dejado perpleja y su argumentación aún más. ¿No es la cruz el logo de Europa?
Anteriormente los tribunales italianos habían fallado que el crucifijo representa un elemento de cohesión en una sociedad que no puede prescindir de su tradición cristiana. “La sentencia desconoce el papel de la religión, sobre todo la cristiana, en la construcción del espacio público y promueve una indiferenciación religiosa que se contradice profundamente con la historia, la cultura y el derecho del pueblo italiano”, concluía el eurodiputado Mauro.
La ministra de Educación de Italia, Mariastella Gelmin, rechazó el fallo señalando que “nadie, aún menos un tribunal europeo impregnado de ideología, logrará arrancarnos nuestra identidad”. Gelmini explicó a la prensa que “la presencia de crucifijos en las aulas no significa una adhesión al catolicismo, sino que representa nuestra tradición”.
El ex ministro de Cultura, Rocco Buttiglione, fue más allá y contra el prejuicio políticamente correcto del respeto a las minorías, pidió el rechazo del fallo porque «Italia tiene su cultura, sus tradiciones y su historia. Los que viven entre nosotros deben entender y aceptar esta cultura y esta historia».
Mons. Luigi Negri, obispo de San Marino-Montefeltro, ha escrito lo que muchos católicos piensan:
El asunto de Estrasburgo, en su brutalidad, es también una consecuencia de demasiado irenismo que atraviesa al mundo católico desde hace décadas, por el cual la preocupación fundamental no es nuestra identidad sino el diálogo a toda costa, estar de acuerdo con las posiciones más distantes. Este respeto de la diversidad de las posiciones culturales y religiosas, sostenido por la idea de una sustancial equivalencia entre las diversas posiciones y religiones, es el que hace perder al catolicismo su absoluta especificidad. Un irenismo, un aperturismo, una voluntad de diálogo a toda costa, que es recompensada de la única manera en que el poder humano recompensa siempre estas desordenadas actitudes de compromiso: el desprecio y la violencia.
Es necesario renovar la conciencia de la propia identidad, de la propia especificidad como acontecimiento humano y cristiano frente a cualquier otra posición, y prepararnos para vivir el diálogo con todas las otras posiciones, no sobre la base de una desmovilización de la propia identidad sino como expresión última, crítica, intensa, de nuestra identidad.
Os invito a leer el artículo que ha escrito mi colega del IESE, Domenec Melé, al respecto y a que me digáis como lo veis.
Entonces qué va a pasar con todas las banderas europeas que incluyen la cruz? Como ejemplo todos los países nórdicos supuestamene los más liberales y aperturistas? Dejamos a esos países sin bandera? o qué se puede inventar Estrasburgo sobre el tema?…
A lo mejor parece una simpleza, pero…. ¿a que no se atreven a convocar referéndums? Porque me parece que queda claro que si preguntan a los europeos de a pie -o sea, la grandísima mayoría- los crucifijos se quedan en su sitio, naturalmente!
Mi hijo de 10 años me preguntó el otro día, tras oír esta información por la radio (es, por cierto, una ocasión de oro para la catequesis familiar a pie de noticia…) si nos iban a obligar a descolgar la pequeña cruz de madera que llevamos en el coche. Le expliqué que lo importante, claro, es llevar a Jesús en el corazón… pero que la cruz es la imagen real (que no símbolo) que nos recuerda quiénes somos, cristianos, que hemos construido Europa soñando con un mundo cristiano donde quepan -quepamos- todos…
Además, tras vivir dos años conviviendo en Israel con judíos y musulmanes, sinagogas y mezquitas forman ya parte del horizonte habitual de esta familia. Y no era infrecuente ver, en los atascos, coches con pegatinas de los símbolos de las tres religiones monoteistas: el pez de los primeros cristianos, la estrella de David y la media luna. Desde el Monte de los Olivos nos hemos emborrachado de la vista más maravillosa del mundo: la Basílica del Santo Sepulcro, levantada en el lugar donde el Señor murió y resucitó, rodeada por la Mezquita Al-Aqsa -centro del islamismo junto a la Meca- y el Muro de las Lamentaciones, único lugar donde los judíos del mundo encuentran la presencia de Yahvé-Dios.
¡Qué ramplonería la nuestra en Europa! Renegar de nuestros orígenes…eso sí que nos pone en riesgo de dejar de existir, y no los crucifijos colgados en escuelas, colegios…
cristinamorenoalconchel
Apreciada Nuria, la pasada semana entre la calle Muntaner y la Avenida Diagonal una joven de una cadena de radio conocida me preguntó: ¿si era partidario de que se retiraran los crucifijos de las aulas?, yo le respondí: que no, «este país es mayoritariamente católico por tradición y al que no le gustará la presencia de crucifijos en las aulas que se marchara a un país musulmán.
La joven sonrió y me corto el micrófono.
Saludos.
Sin partidismos de ningún tipo, si tendencias y desde la libertad de expresión, creo que desde tiempo atrás hay fuerzas que no hacen más que perpetrar ataques a la religion católica. No es algo nuevo en la historia moderna y esta decisión del Tribunal de Estrasburgo es un nuevo reflejo. Sin extenderme más espero me haya expresado con la suficiente claridad.
Querida Nuria: «El número de los necios es infinito» y esto es palabra de Dios. Creo que frente a Estrasburgo solo cabe una respuesta: la ignorancia hacia los ignorantes. Si quieren sacar las cruces de Europa hay que lanzar una atómica sobre cada una de sus ciudades y pueblos, hacer desaparecer los cementerios y arrancar del cuello de millones los símbolos que nos identifican. Reitero, simplemente estulticia.
Añado un tema más sobre a lo escrito sobre los países nórdicos. Me sigue sorprendiendo qué en estos países no hay ningún debate sobre el tema, y creo sinceramente que ni se les pasaría por la cabeza el tenerlo.
La bandera danesa, es una de las más antiguas del mundo y la cruz en la misma significa «cristiandad», sin que nadie se ofenda ni se irrite, y de verdad creo que cualquier opinión sobre el tema planteada allí sonaría como algo muy ridículo.
En un país con una cultura de la libertad de expresión (recordemos el desafortunado asunto de las caricaturas de Mahoma y la quema de banderas posterior , etc) no dedican su tiempo a asuntos tan nimios y discusiones tan absurdas como las que parece poder dedicarse Estrasburgo.
Y me produce un cierto orgullo, al estar casada con uno de ellos, que su Reina, en el año 2009, termine su discurso de Navidad siempre con la misma frase: «y que Dios proteja a Dinamarca y a los daneses».
EL CRIST DE SANT DAMIÀ
QUE LI VA DIR
A SANT FRANCESC D’ASSÍS.
« FRANCESC, VÉS I REPARA LA MEVA ESGLÉSIA QUE AMENAÇA RUÏNA »
PREGÀRIA DE SANT FRANCESC D’ASSÍS DAVANT EL CRIST DE SANT DAMIÀ
« Déu altíssim i gloriós! Il•lumineu les tenebres del meu cor, i doneu-me una fe recta, una esperança certa i uma caritat perfecta; seny i coneixement, oh Senyor! Per tal que jo acompleixi el vostre sant i veritable manament
Aquesta imatge, del Crist de Sant Damià, va presidir la Trobada de jóves franciscans d’Europa, a Assís, a l’any 2007, i presidirà la de Santiago de Compostela, el mes de juliol del 2009. Ha passat, durant aquest any, pels convents franciscans d’Espanya i Portugal. Barcelona 12 i 13 de juny del 2009.
Hace tiempo la Vanguardia Digital me publicó un carta reflexión sobre el fallo de un juez de Valladolid que obligaba a quitar el CRUCIFIJO de las Aulas
Podrian obligar también, bajo sentencia a suprimir los Tarots; Loterías; Magia Negra, porque además de molestar a muchos ciudadanos y ciudadanas, son un engaño patente. Un abrazo. Josep
Compadezco a Europa, por esta hora oscura, no se dejen derrotar!, si quitan uno pongan mil.
La persecución religiosa es a veces sutil.
Desde el otro lado del charco rezamos por ustedes.
Europa no debe defraudar a la Cristiandad. Ánimo.
Europa es cristiana, ¿por qu{e se dejaría que minorías exóticas la gobiernen?
Usualmente se representa a Europa como la villana de la Historia, que ensangregntó el mundo, pero no, existe otra dimensión del aporte Europeo y es la Evangelización. Esta civilización integradora , no podría haber surgido sin la fe.
En Europa nación la ciencia, por la fe. No pudo darse en otro lado.
Cuiden de Europa, cuiden de la cristiandad.
Unidos en la oración
Ja ho cantava en Raimon: QUI PERD ELS ORÍGENS PERD LA IDENTITAT.
N’HE TROBAT UN QUE, EN RESPOSTA A AQUESTA SETENCIA, ES DEDICA A REPARTIR CREUS, ROSARIS I ESTAMPES PEL CARRER I ARREU. NO ESCRIU, NI PREDICA, PERÒ FA FEINA BEN FETA. AMB EL SENYAL DEL CRISTIÀ COMENÇA LA NOSTRA VIDA CRISTIANA. DEFENSEM-LA. JOSEP